adaptación

Tal vez sean ambas cosas

Estrenada en 1994 y dirigida por Robert Zemeckis, Forrest Gump basada en una novela de Winston Groom y protagonizada por Tom Hanks, narra la vida de un hombre con discapacidad mental leve, que se convierte en un testigo y figura central de importantes eventos históricos en Estados Unidos durante la segunda mitad del siglo XX. Desde su lanzamiento, Forrest Gump ha generado todo tipo de opiniones entre los críticos y el público, siendo calificada como épica y simplona, conmovedora y manipuladora, revolucionaria y convencional, una apolítica oda a la bondad e inocencia, una sátira superficial o incluso una pieza de propaganda ultraconservadora. Dereck Malcolm en The Guardian escribió:

“Ni los que estaban relacionados con el filme tenían la más remota idea del éxito que estaba esperando esta extraña parábola, que lanza a un sabio idiota en la historia reciente de los Estados Unidos, y se convierte en un héroe americano de pleno derecho”.

Sin embargo, este objeto inclasificable tiene otra lectura: la compleja relación entre el concepto de destino y el existencialismo. Al comienzo de la película, vemos una pluma blanca movida por el viento que cae y aterriza suavemente justo en las zapatillas sucias de Forrest que está sentado en un banco de una parada de autobús, con una caja de bombones. La pluma que flota y la caja de bombones, ilustran el tema de la película: ¿Está nuestro destino predestinado o son los eventos impredecibles los que nos definen?

En su obra El existencialismo es un humanismo, Jean-Paul Sartre establece una distinción entre la ‘naturaleza humana’ y la ‘condición humana’. Sartre propone la noción de una ‘universalidad de condición’, sugiriendo que, aunque compartimos ciertos aspectos fundamentales de nuestra existencia, como el sufrimiento y la inevitabilidad de la muerte, no hay una esencia predefinida que dicte cómo vivir. En este marco, Sartre argumenta que, a pesar de encontrarnos en un mundo lleno de exigencias y con limitaciones, somos libres de moldear nuestras vidas a través de nuestras propias decisiones. Esta libertad conlleva una responsabilidad considerable, ya que, en ausencia de un destino predeterminado, son nuestros actos los que determinan nuestra experiencia vital. Forrest Gump trata de este tipo de opciones. Terri Murray, en su análisis de la película, argumenta que Forrest Gump critica la noción típicamente estadounidense de que las recompensas materiales son el resultado inevitable de una vida virtuosa y laboriosa, destacando que la vida puede ser injusta y que las personas no siempre obtienen lo que merecen. Paralelamente, Mark Manson en El Sutil Arte de que te Importe un Carajo explora conceptos existencialistas como la libertad personal, la responsabilidad, la autenticidad y la creación de sentido en la vida, desde una perspectiva pragmática. Esta visión coincide con cinco enfoques de la experiencia humana que son evidentes en Forrest Gump:

  1. Incertidumbre: ‘La vida es como una caja de bombones: nunca sabes lo que te va a tocar’. Esta idea permea cada aspecto de la vida de Forrest. Su relación con Jenny, por ejemplo, es un reflejo constante de incertidumbre emocional. A pesar de su amor incondicional por ella, Forrest nunca puede anticipar cuándo sus caminos se cruzarán ni cómo serán recibidos sus sentimientos. Forrest experimenta el éxito de maneras inesperadas y a menudo fortuitas, ya sea en sus hazañas en la Guerra de Vietnam, como campeón de ping-pong, o con su exitosa empresa de barcos camaroneros. Tanto el éxito como el fracaso en su vida surgen de situaciones impredecibles. Esta incertidumbre se magnifica aún más en Forrest, cuya interpretación de los eventos a menudo difiere significativamente de la de quienes lo rodean. Aceptar la incertidumbre es una parte esencial de la vida. Manson, aborda la incertidumbre desde una perspectiva de aceptación y crecimiento personal. Manson sugiere que en lugar de resistirnos o temer a lo desconocido, deberíamos abrazar la incertidumbre como una oportunidad para desarrollar flexibilidad y resiliencia. Reconocer que no todo en la experiencia humana puede ser comprendido, previsto o controlado nos libera de la necesidad de tener respuestas para todo, permitiéndonos vivir con mayor autenticidad. Manson enfatiza que la incertidumbre es el fundamento de todo progreso y crecimiento. Escribe:

“EI hombre que cree que sabe todo, no aprende nada. No podemos aprender algo si antes no desconocemos algo. Cuanto más admitamos que no sabemos, más oportunidades tendremos de aprender”.

La única manera de mejorar es admitir que nuestras creencias, percepciones y acciones podrían estar equivocadas o ser inadecuadas. La incertidumbre no es un enemigo que vencer, sino una realidad que aceptar. El desafío radica en desarrollar una relación más humilde con la incertidumbre, aprendiendo a manejar nuestras inquietudes, dudas y expectativas, para aprovechar los eventos novedosos como oportunidades de crecimiento, aprendizaje y mejora.

  1. Fracasos: ‘Shit happens’. Forrest quería una nueva vida, por lo que empezó a correr. Por más de tres años recorrió el país y se convirtió accidentalmente en una especie de celebridad, atrayendo seguidores y curiosos. Mientras corría, un hombre que intentaba crear slogans para camisetas se acercó a él buscando inspiración. Justo Forrest pisó accidentalmente un montón de excremento de perro. Cuando el hombre se lo dijo, Forrest respondió: “It happens”. El hombre, acortó la frase a “Shit happens” y se convirtió en un eslogan muy exitoso. La vida está llena de eventos desagradables e impredecibles, y la mejor respuesta a menudo es simplemente aceptarlos y continuar. El fracaso es una parte ineludible de la vida y una experiencia esencial para el crecimiento. Manson expone que los errores y el fracaso son oportunidades para aprender lecciones valiosas que de otra manera no serían posibles. El fracaso actúa como una retroalimentación esencial, ayudándonos a entender nuestras limitaciones y a encontrar maneras de superarlas. Nos obliga a reflexionar sobre nuestros valores y a considerar si nuestros objetivos y métodos son coherentes con nuestros propósitos. Manson escribe:

“La mejora de cualquier habilidad se basa en miles de pequeños fracasos y la magnitud de tu éxito se sustenta en el número de veces que fracasaste en algo”.

Por lo tanto, el fracaso no debe ser evitado a toda costa, sino visto como un componente crucial y valioso de la experiencia humana. Nos proporciona información vital sobre nosotros mismos y nuestro entorno, siendo una herramienta clave para aprender, crecer y, en última instancia, mejorar de manera más genuina y personal.

  1. Responsabilidad: ‘Haz lo mejor que puedas con lo que Dios te ha dado’. Forrest en su niñez fue diagnosticado con un bajo cociente intelectual y aunque tenía unas piernas fuertes, necesitaba usar aparatos ortopédicos para ‘enderezar su columna’. Pese a todas sus limitaciones y dificultades, su madre quería que tuviera las mismas oportunidades que los demás, y lo impulsaba a hacer todo lo mejor posible. Le decía:

“Por supuesto que todos somos diferentes, si Dios hubiese querido que fuéramos iguales, nos habría puesto a todos aparatos en las piernas.”

Todos contamos con algunas capacidades, la pregunta es si decidimos potenciarlas o nos dedicamos a lamentarnos por las que no tenemos. Forrest tenía piernas fuertes y gracias a eso, pudo liberarse de sus aparatos ortopédicos y escapar corriendo de los matones. Empezó a correr. Corrió y llegó a la Universidad. Corrió en Vietnam. Sin embargo, Jenny, atormentada por el abuso de su padre en la infancia, avanzó continuamente por un camino de victimismo y autodestrucción. El teniente Dan pensaba que estaba predestinado a ser un héroe de guerra como dictaba su tradición familiar. Luego que Forrest lo salva de morir, se considera una ‘víctima del destino’ y maldice a Dios por obligarlo a vivir con una discapacidad física. Dan nunca fue condecorado como héroe de guerra y Jenny tampoco logró ser una cantante famosa. Manson, afirma que la responsabilidad no es sinónimo de culpa. La responsabilidad se refiere a cómo manejamos y respondemos a las circunstancias de la vida, independientemente de quién sea el causante. Aceptar la responsabilidad implica enfrentar la realidad tal como es, no como nos gustaría que fuera, evitando así vivir en negación y repetir errores pasados. Manson escribe:

“’Culpa’ es tiempo pasado. ‘Responsabilidad’ es tiempo presente. La culpa resulta de las elecciones que se han hecho. La responsabilidad deriva de las elecciones que estamos haciendo en este momento”.

Asumir la responsabilidad de nuestras circunstancias, interpretaciones, decisiones y acciones, juega un papel crucial en la formación de nuestro carácter y la calidad de nuestra experiencia vital.

  1. Establecer límites: ‘Lo siento, teniente Dan, le he estropeado su fiesta de año nuevo, pero es que ella olía a cigarrillos’. La película destaca la importancia de establecer límites a través de varias escenas clave. Un ejemplo notable es cuando Forrest, durante la celebración de Año Nuevo con el teniente Dan, se encuentra en una situación incómoda con dos prostitutas. Al ser insultado por una de ellas, Forrest reacciona y la aparta. Este comportamiento lo repite en las interacciones que Forrest tiene con las parejas abusivas de Jenny. Al presenciar el peligro que enfrenta Jenny, Forrest interviene, mostrando que, a pesar de su naturaleza pacífica, es capaz de actuar para proteger a quienes ama. Forrest es capaz de tomar medidas drásticas cuando las personas que ama están en peligro o cuando se siente insultado o despreciado por personas o ambientes tóxicos. Tratar de complacer a todos es no solo imposible, sino también perjudicial para nuestro bienestar. Ser capaces de decir “no” y fijar límites es una forma de proteger nuestra integridad y evitar caer en la trampa de vivir según las expectativas de los demás. Manson, enfatiza que establecer límites es fundamental para el autocuidado y el autorespeto. Escribe:

“La gente con limites sólidos comprende que una relación sana no implica controlar las emociones del otro, sino que cada uno apoye al otro en su crecimiento individual y para resolver sus propios problemas”.

Aunque puede ser incómodo a corto plazo, establecer límites conduce a relaciones más saludables y a una vida más coherente con nuestros valores.

  1. Mortalidad: ‘Morir es parte de la vida’, Una de las escenas más impactantes de la película es la muerte de Bubba en Vietnam. Forrest, a pesar de sus esfuerzos, no pudo salvar a su mejor amigo, sin embargo, honró su memoria cumpliendo la promesa de iniciar el negocio de camarones. La muerte de la madre de Forrest representa un momento significativo. Ella fue su guía y soporte, y su muerte marca un cambio importante en la percepción de Forrest de la muerte como algo natural. La muerte de Jenny, su gran amor, deja a Forrest como único padre de su pequeño hijo, marcando un nuevo comienzo y responsabilidad. La película trata la muerte no como un final, sino como un aspecto integral de la vida, explorando a través de las experiencias de Forrest temas como el amor, el legado y la continuidad a través de los recuerdos y las acciones. Según Manson, aunque desagradable, la muerte es inevitable y deberíamos esforzarnos por aceptarla. Escribe:

“Solo cuando nos sintamos cómodos con el hecho de nuestra propia muerte, entonces podremos elegir nuestros valores con más libertad, sin las ataduras de esta búsqueda ilógica de inmortalidad”.

La muerte, entonces, puede actuar como un catalizador que nos impulsa a vivir el presente con más plenitud y menos miedo. La consciencia de nuestra mortalidad nos ayuda a apreciar más profundamente el valor de la vida. Es un recordatorio de que nuestra existencia es preciosa y temporal. Cada momento ofrece oportunidades y decisiones, abriendo posibilidades que podemos aprovechar o descartar.

Terri Murray, afirma que la pluma que flota en el viento es una metáfora de nuestras vidas. Somos influenciados por el destino y las circunstancias que están más allá de nuestro control. La pluma, movida al azar por el viento, representa cómo nosotros también nos movemos a través de la vida, a menudo sin control sobre nuestro origen o destino. Sin embargo, a pesar de estas fuerzas externas incontrolables, nuestras decisiones personales son las que realmente dan valor y significado. La película concluye con la pluma blanca iniciando un nuevo viaje flotando en el aire. Este cierre deja a los espectadores contemplando cómo las generaciones futuras vivirán su destino y enfrentarán la incertidumbre. La escena es una invitación a reflexionar sobre la naturaleza impredecible de la vida y la importancia de nuestras decisiones. Mientras que el destino sugiere un camino preestablecido, el existencialismo enfatiza la autonomía individual y la creación de significado a través de nuestras decisiones. A pesar de las fuerzas del destino y la casualidad, nuestras elecciones personales dan forma y significado a nuestras vidas. Forrest al fin, cuando reflexiona en la tumba de Jenny, resuelve el dilema entre destino y existencialismo:

“No sé si mamá tenía razón o si es el teniente Dan. No sé si cada uno de nosotros tiene un destino, o si todos estamos flotando accidentalmente, como en la brisa, pero creo que tal vez sean ambas cosas. Tal vez ambos estén sucediendo al mismo tiempo”.